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¿Te has casado alguna vez?
Estamos en el siglo XXI pero las bodas siguen estando de moda. Una boda es un negocio, seguirá existiendo pues de lo contrario muchos negocios morirían.
Según mi observación y análisis a lo largo de mi vida, distinguiría tres tipos de bodas a groso modo :
Un tipo de boda es la tradicional, por la Iglesia y con un mínimo de 200 invitados. En este tipo de bodas, seas católico practicante o no, eres práctico. Realizas la ceremonia en la Iglesia de tu pueblo, en la que luego bautizarás a tus hijos y seguirás con la tradición católica seas profundamente creyente o ya no sepas en qué creer.
El siguiente tipo es la civil, en un bonito complejo en el que además tienen un restaurante, cuenta igualmente que un mínimo de 200 invitados. En este caso no quieres casarte por la Iglesia católica pues consideras que estás en contra de las muchas cosas que hace y dice. Perteneces al siglo XXI y es más guay hacer la ceremonia por lo civil. Aunque un gran porcentaje de estos matrimonios bautizarán a sus hijos en la Iglesia católica, lo cual es incongruente.
Por último otra civil, pero con muy poquitos invitados, padres, tíos y hermanos. Esta boda es la más auténtica, pues no siguen ningún canon. Piensan que es necesario dicho documento y quieren celebrar dicho cambio de estatus con su familia más cercana.
En este último tipo, los novios no piensan en todo el dinero que han invertido en cada una de las bodas a las que han sido invitados. Una pareja regala un mínimo de 150 euros por boda que asiste. Por supuesto que hay algunos que regalan menos y otros más, depende del nivel económico, de la cercanía con la pareja y de lo que se hayan gastado en su propio vestido y traje para asistir a dicha boda.